Generalmente no asociamos al amor con lo político o la política. Más bien lo asociamos a las telenovelas, revistas del corazón o a cuestiones muy íntimas de las que no se habla en público. Hace unos meses, el 9 de marzo, lanzamos en el Instituto Hannah Arendt el Foro Social de Mujeres Argentinas en ocasión de la presentación del libro La concepción del poder desde las mujeres, una recopilación de los debates que mantuvimos durante dos días aquí en Buenos Aires, en noviembre de 2004, un grupo de mujeres políticas de diversos países de Latinoamérica. (laconcepcióndelpoderddelasmujeres.pdf)
Al hablar sobre nuestra concepción del poder, de la política, de nuestros logros y también nuestras dificultades, surgió la idea de crear una red donde mujeres de distintas profesiones, actividades, ideologías, pudiéramos concebir, gestar, alumbrar (uso expresamente estas palabras ligadas a nuestra función ancestral de crear vida) una sociedad diferente, basada en valores considerados femeninos.
Quienes lanzamos esta convocatoria creemos que para cambiar la sociedad no alcanza con discutir planes estratégicos o programas de gobierno, sino que debemos ir hacia adentro, a nuestra conciencia, y preguntarnos: ¿qué tipo de sociedad anhelamos? ¿con qué valores? ¿qué tipo de relaciones humanas desearíamos que prevalecieran en esa sociedad? ¿qué tipo de conductas y actitudes deberíamos modificar, nosotras primero, para que ese cambio sea posible? ¿Qué podemos aportar como mujeres?
Si deseamos que los “cambios en el afuera puedan realizarse y perdurar,” pensamos que primero hay cambios internos que deberían ocurrir dentro nuestro. Para que se modifique el afuera, primero tenemos que modificar nuestros valores, nuestras creencias, nuestra conciencia, entonces podremos cambiar las conductas. La idea es que este movimiento se vaya dando en distintos ámbitos, porque creemos que si no hay un cambio en el pensamiento es difícil que cambie la sociedad.
Para este año elegimos, y esto fue algo que surgió espontáneamente el 9 de marzo, el tema del AMOR porque cuando empezamos a hablar sobre la concepción femenina del poder, la mayoría de las panelistas coincidimos en que teníamos una concepción del poder que estaba muy relacionada a la conciencia de ser mujer; y eso significaba que entendíamos el poder no tanto como dominación sino como cuidado, servicio, cooperación, integración, como algo ligado a lo maternal y a lo docente, que es propio de lo femenino.
Como la mayoría de los atributos que habíamos enunciado en relación al poder tienen que ver con el Amor, un valor atribuido principalmente a la mujer, decidimos iniciar una serie de encuentros que hemos llamado “Diálogos sobre el Amor como cuestión política” que ustedes podrán ir leyendo en mi blog.
¿Alguna vez han pensado por qué el amor es una palabra tabú en los ámbitos políticos, académicos y públicos? ¿Alguna vez han pensado qué pasaría si ponemos al amor como objeto de la tarea política y la construcción social?
De esto tratan estos “Diálogos” que mañana tendrán su primera jornada de reflexión en el Colegio Nacional Buenos Aires.
Les dejo, para mayor información, la gacetilla de prensa que hemos distribuido ayer a los medios.
INFORMACION DE PRENSA – 7/9/2006
FORO SOCIAL DE MUJERES DE LA ARGENTINA – María Eugenia Estenssoro
“Las mujeres podemos tener un rol fundamental en la gestación de la cooperación y la unión amorosa de las personas, incluso en la política”
La legisladora porteña María Eugenia Estenssoro (ARI), integrante de la Mesa Ejecutiva del Foro Social de Mujeres expresó hoy, al anunciar la primera Jornada de reflexión y diálogo sobre el amor y la política que “frente a la realidad de fragmentación y divisiones que vivimos a diario, desde el Foro Social de Mujeres creemos que podemos tener un rol fundamental en gestar una política de la cooperación, la pluralidad y la comunión que es la unión amorosa de las personas, incluso en la política”.
“Creemos en los ejemplos de las mujeres que luego de situaciones dramáticas han buscado en los valores más humanos cómo restaurar los valores sociales. Un ejemplo es Hannah Arendt que reflexionó acerca de cómo y por qué se puede sentir amor por un mundo capaz de generar el nazismo o los totalitarismos. Otro es Michelle Bachelet, víctima de la represión en su país y hoy símbolo del llamado a la reconciliación chilena” señaló Estenssoro.
La primera jornada de reflexión “Diálogo sobre el amor como cuestión política” organizada por el FORO SOCIAL DE MUJERES DE LA ARGENTINA se realizará el sábado 9 de septiembre, de 9:30 a 16 hs. en el Aula Magna del Colegio Nacional de Buenos Aires, Bolívar 263 de la Ciudad de Buenos Aires.
La entrada es libre y gratuita y las vacantes, limitadas.
La mesa directiva del Foro está integrada por Elisa Carrió, María Eugenia Estenssoro, Diana Maffía, Haydée Copolecchio, Patricia Walsh, Patricia Bullrich, Gabriela Moffson, Norma Morandini, Beatriz Kohen, Fernanda Gil Lozano, Elisa Carca, Elizabeth Rapela, Zaida Azás y Carol Abousleiman.
Historia del FSM
En 2004 se realizó en Buenos Aires un Foro de líderes mujeres políticas de Latinoamérica, organizado y auspiciado por el Instituto Hannah Arendt e Idea (Internacional Institute for Democracy and Electoral Assistance), que dio lugar a fin de 2005 al libro La Concepción del Poder desde las Mujeres (que puede verse en http://www.institutoarendt.com.ar )
El 9 de marzo de este año se presentó dicho libro con mujeres de distintos partidos políticos de nuestro país, y allí surgió la iniciativa de ampliar ese Foro a otras participaciones sociales y realizar un gran encuentro sobre “El amor como cuestión política”.
El amor tabú en la política
Estenssoro indicó que “quienes lanzamos esta convocatoria creemos que para cambiar la sociedad no alcanza con discutir planes estratégicos o programas de gobierno, sino que debemos ir hacia adentro, a nuestra conciencia, y preguntarnos: ¿qué tipo de sociedad anhelamos? ¿qué tipo de conductas y actitudes deberíamos modificar, nosotras primero, para que ese cambio sea posible? ¿Qué podemos aportar como mujeres?
En esta oportunidad elegimos el tema del Amor porque entendemos que existe una concepción del poder muy relacionada a la conciencia de ser mujer; y eso significa que entendemos el poder no tanto como dominación sino como cuidado, servicio, cooperación, integración, como algo ligado a lo maternal y a lo docente, que es propio de lo femenino”.
“Hoy el amor es una palabra tabú en los ámbitos políticos, académicos y públicos. ¿Alguna vez han pensado qué pasaría si ponemos al amor como objeto de la tarea política y la construcción social? De esto se trata este Diálogo”, concluyó la legisladora